No es coincidencia que Jesús escogiera solamente a doce personas para celebrar la última cena. El eligió a sus "amigos" pero realmente eran más que amigos, eran su familia. Con ellos había predicado, ellos fueron testigos de sus prodigios, estuvieron ahí cuando intentaban echarlo de la cuidad, lo escuchaban con atención y aunque muchas veces no lo entendían, El les explicaba nuevamente sus enseñanzas. Y después de pasar tantas experiencias juntos no es extraño que estos simples pescadores, se convirtieran en la familia de Jesús, hasta el punto de confiarles lo más precioso que tenía en la tierra, su Madre.

Hoy Jesús vuelva a escoger a sus amigos y familia para que estén junto a el en el banquete eucarístico. El te escoge a ti, a mi, a nuestras familias. Quiere vernos en torno al altar, donde ocurre el gran milagro, donde Dios baja a  nuestra miseria para darnos consuelo. Y así como hace más de dos mil años escogió nacer en medio de una familia, hoy escoger hacerse pan en medio de la familia.

Si la Santa Misa no es la prioridad para tu familia, te invitamos a que visites tu iglesia católica con tu familia y con mucha fe vivas la Santa Eucaristía y verás como poco a poco Jesús va llenando todos tus vacíos y haciendo de tu familia el hogar lleno de paz que todos deseamos.

Todos los PRIMEROS DOMINGOS de cada mes estaremos ofreciendo la Santa Eucaristía por las familias. Te esperamos en nuestra Iglesia San José para que juntos demos gracias al Dios de la vida y nos alimentemos del pan de los ángeles. Jesús te espera!